Para un buen maquillaje no necesitamos demasiados productos. Es más, si somos novatas es mejor elegir bien unos pocos productos y utensilios básicos sin dejarnos llevar por la amplia y tentadora oferta.
Los imprescindibles para el maquillaje son:
- Un fondo de maquillaje. No sólo debe ser acorde con nuestro tono de piel, sino también con su tipo (grasa, seca, sensible, madura…).
- Un corrector para las ojeras y las pequeñas imperfecciones.
- Una caja de polvos sueltos transparentes.
- Un colorete. Lo mejor es optar por un tono suave y versátil entre rosado y melocotón.
- Dos estuches de sombras de ojos: uno en tonos grises (fríos) y otra en tostados o marrones (cálidos).
- Suelen venir combinados de dos en dos o de tres en tres en cada caja y con gradación de color.
- Dos barras de labios, una en tonos tostados y otra en tonos rosados. Podemos añadir una tercera en un tono más oscuro para la noche dentro de la gama que más nos guste.
- Un brillo de labios transparente o rosado muy claro.
- Un estuche de máscara negra o marrón.
- Un lápiz de ojos marrón.
Con esto tendremos suficiente para empezar. Otros elementos como el eye liner, el perfilador de labios o las sombras de fantasía para la noche pueden esperar a que cojamos práctica.
¿Debe seguirse un orden al maquillar el rostro? Está claro que el corrector, el fondo de maquillaje y los polvos deben aplicarse en primer lugar, pero a partir de ahí no hay reglas.
Casi todas las mujeres empezamos por los ojos para seguir luego con el colorete y los labios, pero hay quien aplica primero el colorete y muchos expertos en maquillaje lo hacen justo al revés: prefieren maquillar primero los ojos y los labios, sobre todo si utilizan tonos fuertes, para luego no pasarse con el colorete.
Aquí tienes algunos consejos.